jueves, 23 de diciembre de 2010

De lo que hace un tal Camilo Blajaquis


Diferencias invisibles

La realidad es que estoy preso, en una cárcel.
Lo real es que soy libre demasiado libre.

La realidad dice que hay inseguridad
Lo real grita que la violencia es consecuencia
de la exclusión, de la marginación, de mentir.

La realidad es que nos quejamos de que todo es una mierda.
Lo real es que somos la especie más fácil de domar.

La realidad vive sometida a cirugías plásticas.
Lo real es eso que no puede ocultar ningún maquillaje.

La realidad puede comprarse... o venderse.
Lo real no tiene precio vive en un mundo donde el dinero no vale.

La realidad tiene un Dios, tiene leyes, trabajo y vacaciones.
Lo real quisiera rebelarse pero la realidad lo metería preso.

La realidad tiene responsabilidades, horarios y un estado.
Lo real tiene un corazón, sentimientos y manos que dibujan.

A este poema lo escribio Camilo Blajaquis. O deberiamos decir Cesar Gonzalez. Ya que Camilo es el nombre que se coloco luego de nacer por la literatura. Mis palabras son tontas para describir su historia. Asi que copio y pego el texto publicado en el excelente blog Cartografias desplegadas. Por favor, tomense un momento y lean sobre Camilo quien estuvo preso, quien fue el famoso y satanizado "pibe chorro", quien ahora nos explica lo que ya deberiamos saber: Que nadie es malo por naturaleza.

(...)
Y sin embargo, otro joven, nombrado "pibe chorro" que en ese reportaje radial dice, que a través de la literatura, pudo escaparse de ese destino señalado para él como para tantos jóvenes que viven en villas, en barrios humildes, que son esos números de los que se alimenta el sistema también, para sus propias estadísticas de "inseguridad", de "paranoia", de racismo, de delincuencia, de violencia; de esa "basura" donde son arrojados, este pibe que estuvo preso cinco años. pudo alojar y a la vez fue alojado por alguien que desde su deseo de brindar espectáculos de magia los trataba como "personas"... palabra extraña, parece, para mucha gente, para muchos jóvenes, niños que habitualmente vemos en las calles. Y por esta otra persona, el descubrimiento de los libros, de Rodolfo Walsh, de la historia, de nuestra historia, de la lectura, de la escritura.
Y ocurre entonces otro efecto distinto que aquel de la devoración o la muerte o la mudez: cuando un ser humano es sacado del ámbito de la biología y se apuesta a la posibilidad, a la existencia de un sujeto, se lo supone, se lo nombra persona y eso abre una dimensión cuya consecuencia, en este caso deviene la lectura en propia escritura: la vida toma otro valor de circulación, una manera de alojar un deseo ya no de lo mortífero sino de lo vivificante.
Y en este caso, con la literatura "“Mi cabeza empezó a cambiar, a incorporar cosas nuevas; todo un mundo que no conocía hasta antes de caer preso, cuando me di cuenta de todo lo que se le oculta a un joven que le toca nacer en un barrio de clase baja, en una condición pobre y humilde como en la que nací. Aparte de excluirte económicamente, te excluyen cultural y simbólicamente. Te excluyen porque sos el negro de una villa, el negro de mierda, vas a ser chorro, obrero y nada más. El sistema te excluye y es mucho más cruel de lo que uno cree –repasa su aprendizaje–. Lo que juega es una exclusión simbólica: el de la villa es un ignorante, es un posible delincuente.” dice en un reportaje a Página/12.
Otro tratamiento posible para la violencia desatada, que somete y disciplina los cuerpos y cierra destinos... en el cual estaba inmerso sin-saber.
Dejar de ser esos objetos deyectados del sistema de los que a la vez se nutre y necesita ese sistema de exclusión, para tomar otro protagonismo en la propia vida. Cesar Gonzalez/ Camilo Blajaquis, luego de ese encuentro con la literatura, desde ese nacimiento, comenzó a hacer una revista, publicar un libro, sostener un blog y recibir mensajes de otros semejantes a él, contando sus intentos de hacer/se un nombre revelándose a ese destino fatalmente determinado; y también, que lo convoquen de distintos medios, distintos jóvenes, para que hable desde ese atravesamiento que en su cuerpo ha acontecido a través de la lectura, de la escritura y de su poesía.
Siempre retorna la pregunta sobre qué valor tendrá el arte en la experiencia colectiva, qué consecuencias tendrá la lectura, la literatura en esa soledad con el libro como acontecimiento subjetivo singular. Su respuesta ante ese destino de balas al que inexorablemente parecía fijado: nombrarse como nuevo nacimiento a través de la literatura, tomar su propia vida a su cargo; producir un golpe certero, un cross a la mandíbula de tantos, pero ni con armas, ni con sus puños cerrados, sino a través de sus manos y su escritura, a través del poder del lenguaje, de sus pensamientos, de sus palabras que ya circulan entre otros.
www.cartografiasdesplegadas.blogspot.com 
www.camiloblajaquis.blogspot.com, es el blog de Camilo para leer mas cosas de el. 



 

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